CONCLUCION

Donde no debería estar nadie.
..............................Ahí estoy...
Vecinos ingratos y paupérrimos
a veces comparten espacios aun más horripilantes.
Tengo ojos en todo el cuerpo,
.........................................-la maldición del poeta -
Vuelo por universos vacíos,
inexistentes,
absurdos.
El poder,
la creación sólo circunvala en lo que
................................-yo-

.............................................hago que sean las personas.
Nada más, que decir. Que ver.
Feliz con todo esto: a tu ceguera.
Malo: a las malas.
Poeta: a las soledades vastas.
Mientras escribo a seres de mi tutoría,
hechos con mi propio barro,
vivo entre abominaciones elaboradas con heces de dioses invisibles.

.................................................¡ qué más injusto!!!
Poco me falta para quedarme sin nada.
Con lo puesto en forma de recuerdo,
pesa y me llena de deseos absurdos y utopía,
entre tanto al mismo tiempo veo a marionetas adolescentes
que no se dan cuenta de lo que hacen.
–no ven-
o
–mienten aterrorizados-
Aunque preferible,
en nuestro infierno,
principal seria la alternativa uno...
Decidme sabihondos:
¿qué es mejor, un ciego o un tonto farsante?
-en esta vida hay que elegir lo menos abominable entre lo terrible,

nunca lo que uno de verdad espera...

(De desconfiguración, 2005)