12/28/2006

LOS ÁNGELES REBOTAN EN EL SUELO

Como todos
estos querubes
que chocamos

en nuestro omiso
y brioso vuelo,

los hombres creen caer
al adjudicarse nuestro nombre,

en abismos enormes
que no tienen fondo ni principio,

y las morenas más hermosas
y con los ojos más tristes

que son una leona
brava y herida

de bellas facciones
y las mejores amantes
(en mi mundo)…

se casan y revolotean
como mariposas grises y cojas
por el vaho simple de un “amor”
judicial y chistoso,

y las mejores poetizas
del cosmos/ se esconden
bajo pedruscos pastosos
con olor a casa de viejas

y comparten el espacio
vacío/ con los chanchitos del hastío, negros.

y las mil hormigas
de la angustiosa soledad
de quien piensa lo peor del otro
………………………………..(que le determina)

del que conoce el arte de volar
y después aterrizar a sus ansias

y las amorosas madres
incestuosas y protectoras,
pasan la navidad solas
soñando y maldiciendo

y viajan al país de las pequeñas sustituciones
del máximo deseo

y se bautizan con gotas de amargo cinzano
con el nuevo nombre común de:
-conformistas-

de: -cobardes-
de: -patéticas-,
de: -condenadas-
de: -mi pena-
de: -mi transparente llanto-
de: -mi melancolía-
de: -mi nostalgia-
de: -lo más hermoso que he vivido…

12/14/2006

EL HONOR DE LA SERPIENTE


La toxina que escupo
y la muerte
se acercan, mi lengua siempre

fue de fuego

y no conocí la leche.

A veces suelo pisar
el suelo

y encontrarme con las personas
de la fiesta

y en verdad muchas

de ellas saben lucir perfectas

como puntos en la recta

y como el vértice entre el arco
y la saeta de Dios.

¡¡Mas yo no quiero!!!!
estos acueductos de libido en mi vida,
mas la soledad pudiese estar deteriorando mi vista…

Y si los ojos refulgentes
se opacan, el veneno

habrá surgido efecto
en mi propio defecto mariposa…

¡I am happy!!!!
¡I am happy!!!!
¡I am happy!!!!
¡I am happy!!!!

FRIEDRICH NIETZSCHE

Autómatas positivistas hoy encumbran su frecuencia

en evidente conducta suicida y cobarde,

como en el vaticinio que tú ostentaste,

a través del asco hecho mil voces

desde un precipicio que jamás fue el mismo,

hasta la llegada de la anatema desesperada

de la soledad auto proyectada

y la lejanía del exilio

de los visionarios ácidos,

de los que buscaban el futuro cual millones de diamantes en bruto,

como lo hiciste tú.



Sí, tú, sin embargo, lo supiste,

cuando en tu cuchillo la sangre

del ιδου ο ανθρωπος

chorreaba a tus enemigos detractores y verdugos,

a las escritoras gallinas religiosas

y a los quiméricos-avaros-demócratas-aristócratas,

que predicaban círculos y rectas líneas en el tiempo,

en el espacio común de los bestiasalvajes y los superhombres.



En la gracia de la página amarilla

que vuelve a florecer batalla tras cruzada,

se honra el día que te pertenece,

te honran los guerreros instruidos en las antitesis

de escabrosos evangelios,

acosando mañanas elevando damajuanas en el nombre de la victoria.



Y brilla tu sol en nuestras espaldas felices

y la noche nos bendice con lo peor,

con vuestra herencia de fuerza

de

voluntad

de

poder

comedidamente asumida,

evidentemente sentida,

aunque igualmente vapuleada y resistida

por los pálidos soldados del secreto invisible

que se mantiene en el trono

y ahora toma ciudades,

esclavos de capitales completas…



Seguimos de pie más allá de todo,

más allá del bien y del mal,

como cualquier cosa que se hace por amor.



Seguimos escupiendo a genocidas

antes victimas,

seguimos adelante mirando donde tú miraste,

bebiendo lo que tú bebiste,

y escupiéndole al rebaño
lo que tu escribiste.

12/11/2006

LA MUERTE DEL GENERAL RASTRERO

Hoy se incinera
en flamas de venganza,

pagando a demonios que ya no perdonan
y a negros y rojos serafines que no olvidan
la traicionera mirada y la insensata movida,

el rudimentario espíritu de un tirano del nuevo averno.

En la calle un alivio de vidrio
se alza encendido con nuestras risas,
con nuestra burla despiadada hacia sus familiares que lloran,

gritamos en frenesí
por las heces que decoraran tu tumba asquerosa,
por los mintos sanguinarios que regurgitaran tus carnes
podridas de antemano,

por las hoces que se juntan con los martillos
y los libros,
gritamos con amargo sabor de justicia metálica:

¡y ya cayó!.
¡y ya cayó!

La historia será
perpetua hoguera
para su escarmiento…

12/10/2006

DE AMORES MALDITOS

Daniela el amor
letargo y flores marchitas
sin que decir,

¡no sigamos!

le dice la gnosis al ánimo,

y discuten sin llegar
al lugar donde el sol vuela fugaz
como la estrella del deseo.

Y tú mujer sabes matar
al exánime en su tumba

como una antigua fascinadora
que la final respiración supiese retardar
y hacerla un tronco en medio de un océano insurrecto

de sublimaciones que no valen
lo social del encuentro
en su total ansia.

¡Si! mujer como eres capaz de reventar vil aparición.

Yo lamento unas penitentes indecisiones
y unos abstractos fenómenos
de la realidad que se comparte,

y en esos momentos
que no tienen tiempo, maldita,

tus verdes cristales encabritan mi alma
navaja, mi sufrimiento abrumador

y te odio
y te vuelvo amar

en afonías de la nada
del rufián
del aburrido espasmo cauteloso

y lo peligroso de un camino
con verdugos y buitres
que aman mi ojo medio cerrado,

mi corazón bien abierto
al pasado

y al presente

como los tres
Paula, tú y yo

en un catre
que no me soporta

somos mediocre feto revuelto

con la entraña de un útero sangriento.

Soy el hijo quizás también muerto
en un wc de espanto…

y tú me sigues manteniendo
en una palestra de desencanto

cual si la fosforescencia me enfocara
y la nada me proyectara

en un cielo feliz…

Te vuelvo a odiar

como si el amor no fuese el final,

como siempre jamás.

Caímos al abismo sin fondo:

al fondo del fondo.

DIARIO

Una mañana, dos
mejillas inflamadas
de beoda soledad

y un enorme catafalco pestilente,
dan la malvenida
a la cría malparida

que se eleva hacia el asfalto
con la mirada perdida
en la eternidad galáctica.

Como se ve tan bardo
el saltimbanqui en llamas,

una flor no lo mira en el trayecto,

pues desde la nada al averno
y desde la choza al lamento,

hay mucho trecho,
cual en todo orden de dichos y hechos.

ONANISMO 2

Todos los vicios
son el trecho
entre desesperados bríos y la eucariota frontera.

Ahora sin nada más en la despensa del mundo,
recuerdo durante algunos segundos
el placer, en un particular extrañar
esa figura tan lozana
de una mujer que no conozco.

¿Será de las hojas este viento casi huracán,
o en ocasiones sería yo,
la última esperanza?

y por supuesto no veo
tan bien

como el águila que fui ayer,
entre los pilares

de la escultura más celeste en este planeta de gorilas calvos.

Somos, de la nada, alma mía, somos…

12/05/2006

CAUTELOSA INSURRECCIÓN

“Siempre serán los Napoleones quienes reinen y los Cristos quienes mueran…”
(Hermann Hesse)


Pero en el abstracto callejón
se abre festiva trinchera
y en su interior una borrachera de líquidos
bien inflamables, generan inmortales
séquitos de llamaradas que mártires por una patria
tan difusa como la estrella,
generaran el nuevo modo de eliminar extrañas corduras
y suprimir en el olvido
los tajamares oxidados de vena rota
y los azules papelillos del precio del muerto que ríe.

RECUA

Misantropía de los hombres
que reptan por montañas y valles,
líbrame del amanecer que me envejece,
de esta piel que puta envenenada
se volvió tras el fracaso
que le pisaba los talones al desengaño.

Súbeme por las áureas escalinatas del día
que sueña el guerrillero,
muéstrame la herencia de Zoroastros
de la cantina, que parece un mausoleo.

Llena mi vaso grande de reflejos y centellas
que me limpien el alma
de el amor
caduco
de la virgen
nefasta,

sácame de esta hoja seca
de verde encanto,
de este mundo
en donde los alfiles apuñalan a la reina,

dilata las ondas de argento de mis cuerdas criminales
que hoy dicen viento,
mar, herradura
en forma de playa de dócil arena,
para dormir
sin aparentar la eyaculación,

muéstrame la serena
paz de su albo seno roído
ofreciéndome un descanso
de vida eterna,

un masaje,
un champañazo,

límpiame las manos de esta raza sometida,
estos poemas mar muerto
de las sangrantes encías,

de los salientes cantos somnolientos
de los amores de una Valentina
que apuntaba mal la sagita roja
al corazón del herido.

Miéntele a mi cama bien deshecha,
a mi vacío intestino fino,
al sudor de azúcar pulcra de los dedos sabor a océano.

Pero como sea,
prémiame con el beso de la última duda.
ODA AL HIELO

Me encanta
como flotas piedra de agua marfil

en aquella solitaria prisión de cristal acedo,
me encanta golpearte contra el universo

entre las manos albas
de aquella rubia noble
y ver como repercutes contra mis labios

de viejas destilaciones egipcias.

Y es que cuando semejante espectáculo se nos muestra tan desnudo,
las solemnes opacidades que envuelven a las saetas de oro,
nos brindan, cual relojes que giran al revés
contradiciendo a Cronos

y sonidos que se ven del color del azófar
que refulge,
solamente de entre las piernas,
de una dama
callejera y malvada, como tú…


Esos sadicos placeres
del frío de las cadenas...